Escritores universales

Edwards Jorge

Lugar y Fecha de Nacimiento(Defunción):Jorge Edwards Santiago de Chile(1931)
Narrador y periodista chileno, nacido en Santiago. Es abogado y se ha desempeñado como diplomático, en París junto a Pablo Neruda (lo que narra en sus memorias Adiós, poeta, 1990) y en la Cuba de Fidel Castro (ídem Persona non grata, 1973). Al comienzo del gobierno de Augusto Pinochet residió en España (1973-1978). Ha escrito numerosa obra periodística en Chile y otros países, así como varios libros de cuentos, donde trasunta fieles observaciones sobre la sociedad chilena tradicional y decadente: El patio (1952), Gente de la ciudad (1962), Las máscaras (1967) y Temas y variaciones (1969). Sus novelas, siguiendo el modelo de la crónica y el realismo, trazan vastos cuadros de la vida chilena en distintos momentos de nuestro siglo: El peso de la noche (1965), Los convidados de piedra (1978), El museo de cera (1981), La mujer imaginaria (1985) y El anfitrión (1988).
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El orden de las familias (fragmento)
" Antes de dormir, en la habitación oscura, pienso en los racimos de mujeres asomadas a las ventanas. Los vestidos se abren y surgen los pechos turgentes, los vientres redondos, marcados por la fatiga. Me hago la idea de levantarme y partir otra vez a buscarlas. Podría pagar con un cheque. Pienso después en la balsa, en el agua tranquila y engañosa, en tus chillidos. Avanzas en la oscuridad, en el traje de baño de entonces. Tus muslos duros, blancos, en contraste con la tela negra y elástica. La verdad, no voy a salir; prefiero hundirme en la cama y esperar que llegues. Pero no llegas nunca. Te demoras interminablemente en llegar. La otra noche entró mi madre, tartamudeando, fétida a alcohol, indignada contigo porque no vienes a visitarla nunca . "No es muy agradable venir a esta casa de visita", le dije, y soltó el llanto. Sollozaba y se estremecía entera. Me dio pena, pero tuve que expulsarla de la habitación para que me dejara dormir. En vez de dormir, permanecí con los ojos abiertos en la oscuridad, esperándote. Igual que ahora. A sabiendas de que no ibas a llegar, de que la oscuridad permanecería idéntica, deshabitada, sin engendrar

santoago de Chile, (1931)


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