Adiós mi chaparrita
L. y. M. de Tata Nacho
Adiós, mi chaparrita,
no llores por tu Pancho
que si se va del rancho
muy pronto volverá.
Volverás que del Bajío
te traigo cosas buenas,
y un beso, que tus penas
muy pronto olvidarás.
Los moñitos pa’ tus trenzas
y pa´ tu mamacita
rebozos de bolitas “naguas” de percal.
¡Uy! ¡que ... caray...! ¡Ay caray!
No llores chula mia
porque me voy “tristiando”
y quiero irme cantando,
que el llanto me hace mal.
Alegres siempre fuimos,
y cuando vuelva quiero,
recibas tu ranchero
sonriendo como el sol.
Y digas que al marcharse
por lejos que se fuera
llevaba a su ranchera
prendida al corazón.
¡Ay! ¡que caray...!...